Lo anterior fue informado por el gobernador Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, quien dijo que ya se revisan las acciones legales para librar ese obstáculo y continuar con los planes de dar a esa zona de la ciudad un área verde.
El secretario general de Gobierno, Roberto López Lara, confirmó a este medio que Gerardo Godoy Solano, quien fue uno de los detenidos en torno a este caso, promovió el juicio de amparo 1057/2014, para pedir que no se continuaran los trabajos sobre el terreno.
Como parte del juicio de garantías, el Juez Quinto de Distrito en materia de amparo concedió una suspensión provisional, para que las cosas se quedaran como estaban hasta ese momento. López Lara aclaró que la suspensión se concedió después de que ya el edificio había sido demolido, pero de cualquier forma se detuvieron los trabajos para evitar caer en desacato.
El funcionario estatal dijo que ya preparan las acciones legales, para aclarar al juez que el proyecto es de interés público, por lo que al margen de las investigaciones que se siguen en torno a este caso, es necesario continuar con las obras en el inmueble.
López Lara informó que el argumento de Godoy Solano en el juicio de amparo es que no deben hacerse movimientos en el edificio, hasta que concluyan las investigaciones en torno a los homicidios. Sin embargo, señaló que también se precisará al juez que el edificio ya no existe, porque fue demolido a través de un procedimiento de implosión.
Gerardo Godoy, también conocido como El Cihua, fue una de las ocho personas contra las que se giraron órdenes de aprehensión, por los delitos de homicidio calificado y encubrimiento. Fue él quien señaló a Gerardo Flores Gómez El Tatuado, como el autor de los homicidios de cuatro estudiantes de preparatoria y el padre de uno de ellos.
En principio, en contra de Godoy Solano sólo se había determinado el arraigo, pero finalmente se le decretó la orden de aprehensión, para que siguiera el proceso en prisión. El líder de la FEG, David Castorena, quien es señalado como autor material de al menos dos de los homicidios, todavía sigue prófugo.
Todo comenzó cuando en diciembre de 2011, cuatro estudiantes y el padre de uno de ellos acudieron a las instalaciones de la FEG, para intentar arreglar un problema por el pago de derecho de piso, que la organización estudiantil cobraba a los comerciantes ubicados alrededor de la escuela Normal. Luego de que sus familias denunciaron su desaparición, comenzaron las investigaciones, hasta que se encontraron los cuerpos en el terreno de la FEG.
El inmueble fue asegurado y luego de confirmarse que era propiedad del gobierno del estado, se anunció un proyecto para convertirlo en un parque, por lo que en julio del año pasado, utilizando un método de implosión, fue derribado el edificio.
En total abandono
A más de seis meses de que se demolió el edificio Hermenegildo Romo García que fue sede de la Federación de Estudiantes de Guadalajara (FEG), el espacio y sus alrededores lucen descuidados y sin recibir alguna intervención a pesar de que había anunciado la construcción de un espacio recreativo en dicho lugar.
“Ya desde que tiraron el edificio se fueron los trabajadores y ya, no ha habido movimiento, no se ha visto que vengan a checar haber si van a construir algo, nada. Muerto totalmente. Nomás tiraron el edificio. Se ve horrible, parece baldío porque parece abandonado, hay mucha basura a un lado”, comentó Estefanía Flores, vecina del sitio.
Las banquetas han sido utilizadas por algunos que aprovechan para tirar costales de escombro, bolsas de basura y llantas. En el espacio aún permanecen vallas de seguridad y al interior se encuentra una persona de vigilancia. (Arturo Ramírez Gallo/Guadalajara)
Cronología
El 9 de diciembre de 2011, Armando González Gallardo, de 56 años de edad, su hijo Francisco Ismael Gómez Saucedo, de 21 años; Gabriel Morán Cervantes, de 17; Juan Pablo Valentín Guerrero, de 16, y Francisco Javier Carrillo García, acudieron al edificio de la Federación de Estudiantes de Guadalajara y ya no regresaron
Al comenzar las investigaciones, se conoció que habían ido a arreglar un problema por el derecho de piso que la FEG cobraba a los comerciantes ubicados en torno a la escuela Normal
Los cuerpos de los cuatro estudiantes y el padre de uno de ellos, fueron encontrados enterrados en la parte posterior del edificio de la FEG
Entre los señalados por el homicidio, están Gerardo Flores Gómez (El Tatuado”, quien se entregó a las autoridades y luego murió en prisión; Gerardo Godoy solano El Cihua, así como el ex presidente de la FEG, David Castorena, quien se encuentra prófugo, y tres menores de edad
El 4 de julio, con un proceso de implosión, el gobierno del estado derribó el edificio de la FEG, con la intención de convertir el inmueble en un parque