“Ya tenemos conocimiento que uno de los fallecidos es ex policía de Ciudad Guzmán, entonces vemos que esta célula está siendo nutrida principalmente por ex policías”, comentó Nájera Gutiérrez de Velasco en conferencia de prensa.
El pasado 11 octubre, dos de los civiles que perdieron la vida fueron reclamados por sus familiares. Uno de los occisos respondía en vida al nombre de Armando Manuel Dávalos Yerenas, de 24 años, originario del municipio de El Grullo, quien se desempeñó, hasta 2012, como policía municipal de Ejutla. El segundo cadáver fue identificado con el nombre de Gustavo Hernández Íñiguez, de 30 años, avecindado en la colonia Centro, en el municipio de Tepatitlán.
El funcionario estatal señaló que un juez otorgó el arraigo en contra del único detenido por el tiroteo, en donde perdieron la vida, además, tres policías estatales, entre ellos un comandante. “Esta persona está arraigada, ya se nos otorgó el arraigo y seguiremos en investigación, ya que, como lo dijimos el día sábado, esta persona ha participado en privaciones de la libertad y en homicidios en la zona de los Altos”.
El pasado martes, sujetos armados, al parecer integrantes de una célula del Cártel Jalisco Nueva Generación, se enfrentó a balazos en Tepatitlán con elementos de la policía estatal y municipal. Dicha célula está relacionada con varios secuestros y homicidios.
La balacera duró casi dos horas, tiempo en el cual los presuntos sicarios se atrincheraron en una vivienda de la calle Pipón y Noche Buena, en la colonia El Pipón.
Los uniformados caídos fueron reconocidos como el supervisor de la policía estatal y ayudante del comisario general, Rubén Gerardo Landeros Romo; y los oficiales Luis Cley Ruiz Leal y Jorge Alberto González López, además murieron cuatro presuntos delincuentes.
Jorge Martínez, Milenio