Dicho albergue fue cateado por fuerzas federales el martes, en respuesta a cinco denuncias interpuestas por padres de familia debido a que no les regresaban a sus hijos. El gobernador Salvador Jara Guerrero solicitó la intervención de la PGR.
En el operativo fueron rescatados seis bebés, 154 mujeres y 278 hombres menores de edad, 50 mujeres y 109 hombres mayores de edad. Se desconoce la edad de cuatro mujeres y seis hombres debido al grado de desnutrición que presentan, indicó el titular de la Suprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), Rodrigo Archundia Barrientos.
Ya fueron detenidas nueve personas que rinden su declaración ministerial en instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado.
Tomás Zerón de Lucio, director de la Agencia de Investigación Criminal, compartió con la prensa algunos de los relatos:
- La mayoría de las víctimas coinciden en que eran obligados por el personal del internado a tener sexo oral o relaciones sexuales, a veces a cambio de dinero y en otras ocasiones con amenazas.
- Las versiones destacan a un empleado apodado El Sito que amenazaba a las víctimas con matarlas o extraerles los órganos si no accedían a tener encuentros sexuales.
- Una menor también mencionó que uno de los administradores del lugar la violó y embarazó, pero fue golpeada en el vientre en repetidas ocasiones hasta que abortó.
- Dijeron haber sufrido maltrato psicológico y físico: los menores eran golpeados con varas de madera y mangueras cuando no cumplían órdenes.
- Uno de los afectados habló de “El Pinocho”, un cuarto de castigo de escasos dos metros cuadrados y tres metros cúbicos en el que eran encerrados por largos periodos, sin comida y sin agua; sin embargo, otros jóvenes les proveían alimentación a escondidas.
- Las víctimas eran retenidos en el albergue contra su voluntad. Incluso, una de las personas declaró que fue internada con engaños de Rosa Verduzco, quién le ofreció liberar a su prima a cambio de que ella se quedara, pero cuando ingresó, no dejó salir a ninguna de las dos.
- Los testimonios revelaron que les daban de comer fruta podrida, pan enlamado y alimento con cucarachas. Tomás Zerón puntualizó que los habitantes de La Gran Familia vivían en condiciones inhumanas, pues se encontró fauna nociva en dormitorios y espacios de alimentación, además de que se encontraron más de 20 toneladas de basura en donde ellos desarrollaban su vida cotidiana.
Los primeros sorprendidos del tamaño del problema fuimos nosotros; considerábamos a este como uno de los centros al que podíamos confiar el cuidado de los menores (…) contaba con prestigio para todos”, reconoció Murillo Karam.
Del lugar hoy sacaron más de 10 toneladas de basura. Autoridades sanitarias, médicos, personal de limpieza del ayuntamiento y defensores de derechos humanos ingresaron al lugar y confirmaron que los albergados estaban desnutridos, tenían piojos y presentan huellas de maltrato.
La Policía Federal (PF) y efectivos del Ejército y de PGR mantienen acordonada la casa hogar, ubicada en la carretera que une la ciudad de Zamora con la vecina Jacona.
La prensa no tiene acceso al inmueble, pero desde el exterior se respira un aire fétido. A un costado del lugar hay un chiquero con cerdos.
La extracción de la basura requirió del empleo de camiones. Parte de los desechos eran alimentos en descomposición que, según testimonios, se daban de comer a los recluidos.
Al mismo tiempo, personal de la PGR revisaba hoy caso por caso las peticiones de personas que reclaman la custodia de menores internados en La Gran Familia. Los demandantes rendían declaración y se sometían a pruebas de ADN para confirmar las relaciones de parentesco.
Con el mismo propósito, la PGR les pidió que presenten actas de nacimiento u otros documentos probatorios.
Rosa del Carmen Verduzco Verduzco (Mamá Rosa), la mujer que dirigía el albergue y está en el centro de atención de este caso, fue hospitalizada de emergencia a la medianoche del martes, horas después de su detención, por una crisis nerviosa.
La directora de la casa hogar fue llevada en ambulancia al hospital San José de esta ciudad.
La habitación de Verduzco y el exterior del nosocomio quedaron bajo resguardo de agentes de la PF.
Cerca de la medianoche del martes, paramédicos y bomberos de Zamora y Jacona bajaron de un camión de la Policía Estatal colchonetas y cobijas para los menores, quienes, según las propias autoridades, dormían en el suelo entre ratas y cucarachas.
El gobernador de Michoacán, Salvador Jara, informó que ordenará una revisión de todos los albergues del estado para confirmar que se cumplan las normas, sin que se trate de una cacería de brujas.
La alimentación en el albergue hoy estuvo a cargo del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) estatal y municipal.
La alcaldesa de Zamora, la panista Rosa Hilda Abascal, manifestó que ella estuvo en el lugar el pasado 6 de enero, pero no se percató de los abusos.
En Guadalajara, Juan Manuel Estrada Juárez, presidente de la Fundación de Niños Robados y Desaparecidos, recordó que en 2011 presentó ante autoridades estatales un listado con 200 nombres de niños de Jalisco, que el Consejo Estatal de Familia de esa entidad, bajo la dirección de Claudia Corona Marseille, había entregado directamente a La Gran Familia.
La entrega ocurrió durante el gobierno del panista Emilio González Márquez.
Estrada dijo que, acerca de este caso, presentó quejas en 2011 ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la Contraloría y la Procuraduría General de Justicia del Estado, pero no hubo resultados.
Foto Agencia Esquema
La Jornada Jalisco