La periodista respondió a un anuncio en el que se solicitaba «personal femenino, (que) labore en oficinas gubernamentales, (entre) 18-32 años, disponibilidad de horario. (Sueldo entre) $8.000 y $14.000 mensuales (entre 480 y 840 euros)».

La mujer que se encarga de realizar el «casting» entrevista y anota la talla y peso de las candidatas y, les explica sus actividades, «entre ellas, acompañar en todo momento al dirigente ya ganada su confianza». A las seleccionadas se las invita a satisfacer los deseos sexuales de Gutiérrez de la Torre, quien da el visto bueno definitivo. Quienes pasan la prueba y aceptan formar del «harén» entran en la nómina del PRI como secretarias o recepcionistas.

En la propia emisora que realizó la denuncia, Gutiérrez de la Torre se defendía alegando que «es un invento que hicieron desde hace como doce años». En un comunicado posterior anunciaba que plantearía acciones penales contra el programa.

Vestirse de manera «sensualona»

Es cierto que en 2003, cuando era diputado local, el diario «Reforma» publicó una información muy similar en la que sólo cambian algunos detalles, como que la «celestina» no era Claudia Priscila Martínez, sino Josefina Delgadillo. Los sueldos eran prácticamente los mismos, el proceso de selección pasaba por vestirse de manera «sensualona» y la prueba final también pasaba por el tálamo del patrón.

Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre es hijo de Rafael Gutiérrez, «El rey de la basura», que fuera líder de la Unión de Pepenadores (personas que separan y clasifican los desperdicios en los basureros). Cincuentón y grandote, en su biografía política destacan varios episodios de matonismo y violencia.

httpv://youtu.be/X1LGTZ3qVEg 

Manuel M. Cascante