Lo que en su momento fue denunciado por el entonces gobernador entrante, Roberto Sandoval Castañeda con un “los nayaritas fuimos víctimas, de unos de los abusos y explotación de la que no    se tiene memoria por parte de un gobernador”, no obstante ha quedado claro que pasará a la historia como el robo más grande de la historia sin que se persiga al ladrón, debido a que el Congreso    del Estado aprobó las cuentas y sostuvo que “nada hay que investigar”.

El gobernador que se llamó indignado en aquel entonces ha guardado silencio y se olvidó de castigar el robo, debido a que se presume que recibió un llamado de atención, debido a que parte    del dinero robado de las arcas públicas se sostiene que fue destinado, al igual que en otros estados gobernados por priistas, a financiar la campaña del PRI y su candidato a la presidencia de la    república, Enrique Peña Nieto.

Han quedado atrás aquellos aciagos días en que el hoy gobernador tuvo que despedir a casi 1 mil 500 trabajadores que recibieron su “basificación” en los últimos días de la administración    del dispendio y derroche de los recursos públicos, que originó severos problemas para el pago de las primeras quincenas de una burocracia boyante pero improductiva, como es reconocida y llamada    la nayarita. 

Esa falta de dinero en las arcas públicas, es causa de que el estado haya visto como se han agudizado otros de sus graves problemas, como son la violencia familiar, el desempleo que tiene a    Nayarit en uno de los últimos lugares a nivel nacional, pues la crisis económica se conjuga con la deuda pública para tener al estado y a su gobierno “contra la pared”.

En la revisión de los informes semestrales que brinda la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la deuda de Nayarit durante el ejercicio de González Sánchez pasó de 363 millones a    la extratósferica cifra de 5 mil 53, por lo que de manera nominal se incrementó en un 1,424 por ciento, porcentaje similar a los registrados en estados de Coahuila, Tabasco, estado de México,    Nuevo León, Veracruz, que al igual que la entidad nayarita están al borde de la quiebra técnica, porque el dinero se fue a pagar las cuentas de campaña, además de lo que se hayan robado los    Moreira, Granier y demás burócratas que hoy gozan del dinero que nunca soñaron tener en sus bolsillos y cuentasprivadas.

Los pasivos del estado equivalen a 725.5% de los recursos que genera mediante su recaudación tributaria y cobro de derechos el estado, por lo que los analistas recuerdan las palabras de    Sandoval González: “Los nayaritas fuimos víctimas, de unos de los abusos y explotación de la que no se tiene memoria por parte de un gobernador”, que hasta la fecha el tema no lo ha vuelto a    señalar tan críticamente y se refiere a la deuda como algo lógico debido a la crisis nacional que enfrenta el país.

En tanto que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que en abril los resultados del Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE) para el cuarto    trimestre de 2012, Nayarit fue la entidad que registró el mayor avance económico, lo que no comparte el mandatario y mucho menos los habitantes del estado.

El Gobernador ha admitido que, derivado de la deuda pública, se han registrado paros de actividades en sectores como el de salud, mientras que los indicadores señalan que el año pasado la    entidad cerró un índice de desempleo de 6.28% el más alto en el país.

La alta dependencia de la burocracia como generadora de fuentes de empleo y la decadencia de una actividad histórica en la entidad, como es la tabacalera han pesado en el número de plazas    disponibles.

Y en cuanto a las carencias financieras, es sabido que las instituciones crediticias, como Banco Azteca y las Sociedades Financieras, han incrementado sus promociones llenando sus archivos    de solicitudes de crédito, y que las demandas contra los morosos están al por mayor.

Así las cosas, próximo a las elecciones intermedias, los nayaritas ya tendrán motivos más que sobrados para pensar quién puede perseguir a Ney González, para que rinda las cuentas que    Roberto Sandoval se ha negado a pedirle, para que enfrente la actuación de la justicia, que hoy en Nayarit es un reclamo.

Vallarta Network