El objetivo del Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas Salvador Zubirán (INCMNSZ) es apoyar a que los enfermos reciban de manera temprana un tratamiento útil, científicamente probado, para disminuir la posibilidad de complicaciones y promover su bienestar.
Estas deberán seguirse con la supervisión de personal médico, ya sea a través de los servicios ofrecidos por el gobierno federal y local o con un médico de confianza.
Cuenta un ciudadano que conocía del contenido de algunas de las recomendaciones del INCMNSZ y que las había comentado a otras personas cercanas, que hace unos días recibió una llamada de una persona desesperada, la cual le comentó que el médico les expresó que su abuelito de 90 años de edad ya no tenía remedio para superar la enfermedad de COVID-19 y que iba a morir porque ya casi no podía respirar, no obstante que contaba con un aparato concentrador de óxigeno y con los cuidados médicos. De inmediato le recomendó que a su abuelito lo acostaran boca abajo para que pudiera respirar mejor y que además consultaran la página web del INCMNSZ con relación al COVID-19, así lo hicieron, y el abuelito sobrevivió a su enfermedad.
Es recomendable en lo posible abrir las ventanas o puertas de la casa para mayor ventilación y circulación de aire fresco. Las cortinas o persianas de las ventanas del cuarto del paciente, en lo posible deben estar abiertas para permitir la entrada de luz solar.
El aparato concentrador de oxígeno debe de estar ubicado en un lugar donde haya mayor entrada de aire limpio, fresco y no contaminado o viciado, para que el compresor aspire aire limpio y rico en oxígeno (21%), se debe vigilar que el filtro de aire del compresor esté limpio y que la zeolita que filtra el oxígeno del aire no esté agotada o caducada (dura un año en uso aproximadamente). En lo posible se puede medir la concentración de oxígeno que se proporciona al paciente con un medidor modelo CY-12C que puede por ejemplo obtener en Amazon, normalmente la concentración de oxígeno está al 93% en un flujo de 5 litros por minuto (las personas adultas aspiran 4.5 litros de aire en cada aspiración). Cuando vaya a adquirir un aparato concentrador de oxígeno revise la especificación del límite de tiempo de uso continuo, para evitar sobrecalentamientos del compresor del aparato.
Carlos Slim uno de las personas más ricas del mundo cuando recientemente se enfermó de COVID-19 se atendió en el Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas Salvador Zubirán.
Coronavirus: por qué la técnica de acostar a los pacientes boca abajo les está salvando la vida a muchos enfermos de covid-19
Hay algo que en los hospitales puede llamar especialmente la atención: muchos de quienes padecen covid-19 están acostados boca abajo.
Aumentar la cantidad de oxígeno
Se trata de una antigua técnica que ha demostrado ser efectiva a la hora de combatir las enfermedades respiratorias graves.
Conocida en el mundo médico como “decúbito prono” (en términos comunes, boca abajo), esta posición ha comenzado a administrarse cada vez con más frecuencia en los miles de pacientes víctimas de la pandemia que hoy están siendo tratados en las unidades de cuidados intensivos.
Este método ayuda a las personas a aumentar la cantidad de oxígeno que ingresa a sus pulmones.
“Muchos de los pacientes con coronavirus no están oxigenando bien sus pulmones y eso los daña. Y aunque en los centros médicos les administramos oxígeno, en ocasiones parece no ser suficiente. Y así, lo que hacemos es acostarlos boca abajo para permitir que los pulmones se vuelvan a expandir”, dice un médico.
El investigador agrega que la parte más pesada de los pulmones está justamente en la espalda y que, por lo mismo, si el paciente está boca arriba, la dificultad para respirar va a ser mayor.
Más flujo de sangre
“La abertura de los pulmones en decúbito prono permite que haya más flujo de sangre. El cambio es notable y lo hemos confirmado con muchos pacientes”, afirma un médico.
La técnica -a la que también se le denomina “pronación”- ha sido tan reconocida por los médicos que incluso la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) la recomendó en marzo de este año para los pacientes con covid-19 que sufren del síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA).
Además, una investigación basada en 12 enfermos graves de covid-19 que se atendieron en el hospital Wuhan Jinyintan, en China, concluyó que los pacientes que no fueron acostados boca abajo tuvieron una capacidad de expansión pulmonar “deficiente”.
Al contrario, el estudio -publicado por la Sociedad Torácica Americana- indica que los enfermos en posición decúbito prono respondieron de mejor manera al oxígeno proporcionado.
¿Cuáles son los riesgos de la pronación?
Ahora bien, lo que parece un procedimiento simple puede tomar mucho tiempo y muchas manos.
La OMS, de hecho, señala que para llevarse a cabo sin riesgos “se requiere un número suficiente de profesionales experimentados”.
Aquí está el enlace electrónico de internet para que conozcas las opciones contra el COVID-19, dar click:
http://www.incmnsz.mx/opencms/contenido/APOYO-EN-EL-MANEJO-DE-COVID-19-EN-CASA/
Paciente de COVID-19 acostado boca abajo.
La maniobra para voltear boca abajo a un paciente de COVID-19