Según las primeras investigaciones, el imputado, identificado como Timothy Paul Hitchcock, ya tenía antecedentes penales en el país vecino por el mismo delito.
Se dio a conocer que en Florida, el sujeto fue detenido y sentenciado a 10 años de prisión por delitos sexuales, aunque en el 2009 salió libre bajo la condición de someterse a tratamiento y acudir ante las autoridades.
Sin embargo no cumplió con las leyes americanas y escapó, cruzó la frontera por Tijuana y se ocultó en Puebla, de donde arribó a la Ciudad de México para laborar como docente en el colegio Westhill Institute Kinder, donde se hacia llamar Tim Andrews.
Al plantel educativo, Hitchcock ingresó con documentación falsa. Ahí dijo ser mexicano de padres extranjeros, con lo que incluso tramitó credencial de elector y licencia de conducir.
La Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México descubrió la identidad del sujeto y comenzó las indagatorias para concluir en la detención.
No fue hasta que el menor denunció la violación de la que fue objeto, que las autoridades del plantel educativo se dieron cuenta que todo era falso. Por esta situación Hitchcock fue ingresado al Reclusorio Oriente después que una juez ordenara su detención.