GUADALAJARA, JALISCO (29/JUL/2014).- Las actividades cotidianas en las calles de la colonia Villaseñor de Guadalajara se vieron trastocadas la tarde de este martes, cuando una persona murió y tres más quedaron heridas por balas en un suceso que además salió de lo común, pues se presume que quien falleció era un delincuente.
Era la una de la tarde cuando se comenzaron a escuchar disparos en la calle Jesús García casi al cruce con Jaime Nunó; las detonaciones provenían de una panadería frente a una clínica del Seguro Social.
Un vecino de la zona volteó hacia el lugar y vio lo que pasó a continuación: del negocio salió gente a toda prisa y uno de ellos tropezó. Un hombre mayor fue tras de él y le disparó, y disparó también en contra de un chofer de taxi, Francisco Ramírez Pérez, de 45 años, a quien acertó un tiro, "pero se le encasquilló la pistola", según la versión del testigo.
La persona que tropezó murió justo a media calle; los vecinos avisaron a la Policía y a la Cruz Verde.
Todo fue un tumulto posterior que sofocaba a las autoridades de la Fiscalía y de la Policía de Guadalajara: familiares y demás daban sus versiones de los hechos. Fueron tres personas las heridas, entre ellos el propietario de la panadería, Salvador Ledezma Orozco, de 66 años; y su hijo, Eduardo Ledezma Ávila, de 35 quienes fueron trasladados a la unidad Delgadillo Araujo junto con el taxista:
"Refieren los mirones, es el intento de asalto de una panadería. Por ahí refieren que repelieron la agresión los propietarios de la finca. (...) El fallecido se presume es uno de los partícipes del asalto", relato uno de los oficiales de la policía.
Eran cuatro los presuntos que ingresaron a robar según contaron a las autoridades. Dos personas más quedaron retenidas; fueron trasladados a las instalaciones municipales.
Era la una de la tarde cuando se comenzaron a escuchar disparos en la calle Jesús García casi al cruce con Jaime Nunó; las detonaciones provenían de una panadería frente a una clínica del Seguro Social.
Un vecino de la zona volteó hacia el lugar y vio lo que pasó a continuación: del negocio salió gente a toda prisa y uno de ellos tropezó. Un hombre mayor fue tras de él y le disparó, y disparó también en contra de un chofer de taxi, Francisco Ramírez Pérez, de 45 años, a quien acertó un tiro, "pero se le encasquilló la pistola", según la versión del testigo.
La persona que tropezó murió justo a media calle; los vecinos avisaron a la Policía y a la Cruz Verde.
Todo fue un tumulto posterior que sofocaba a las autoridades de la Fiscalía y de la Policía de Guadalajara: familiares y demás daban sus versiones de los hechos. Fueron tres personas las heridas, entre ellos el propietario de la panadería, Salvador Ledezma Orozco, de 66 años; y su hijo, Eduardo Ledezma Ávila, de 35 quienes fueron trasladados a la unidad Delgadillo Araujo junto con el taxista:
"Refieren los mirones, es el intento de asalto de una panadería. Por ahí refieren que repelieron la agresión los propietarios de la finca. (...) El fallecido se presume es uno de los partícipes del asalto", relato uno de los oficiales de la policía.
Eran cuatro los presuntos que ingresaron a robar según contaron a las autoridades. Dos personas más quedaron retenidas; fueron trasladados a las instalaciones municipales.
Informador