Por su parte, el legislador por el Partido Acción Nacional (PAN), Alberto Esquer Gutiérrez, afirmó que construir un edificio no puede ser una prioridad para Jalisco, pues con esos recursos habría alcanzado para construir tres presas y pagar el transporte gratuito durante dos años a los estudiantes de la entidad. Además, lamentó que nadie va a revisar cómo se gastó el dinero de la ASEJ, pues el auditor superior tiene “secuestrados” a los diputados con las cuentas públicas.
MILENIO JALISCO dio a conocer que el edificio que este lunes comenzó a utilizar la ASEJ requirió una inversión de al menos 318 millones de pesos. Para obtener esos recursos, el auditor superior diseñó durante los últimos cinco años un presupuesto ficticio, inflando principalmente el capítulo de servicios personales, es decir, salarios y prestaciones. El monto usado para el inmueble equivale a una cuarta parte del dinero que recibió el órgano fiscalizador para cumplir su tarea de vigilar el buen uso de los recursos de los jaliscienses.
Entrevistado ayer al respecto, el diputado local Miguel Castro señaló que se ha manejado que los recursos salieron de ahorros. Sin embargo, indicó que cuando se generan ahorros sobre la nómina en todos los años, “pudiéramos caer en una situación de carácter ficticio”. De esta forma, indicó, recursos que se entregaron para el trabajo de la auditoría pudieron tener un fin distinto.
Lo anterior tendría que llevar a revisar la eficiencia de la Auditoría Superior para generar resultados, señaló el presidente de la Comisión de Hacienda del Poder Legislativo.
Por su parte, Alberto Esquer dijo que es evidente que el órgano fiscalizador no está cumpliendo con su función, pues todas las cuentas públicas se arreglan en la mesa con los diferentes actores políticos del estado.
Indicó que el problema es que nadie revisará al auditor y recordó que, a pesar de que el Pleno del Congreso del Estado lo citó para que informara sobre el edificio, no acudió.
Agregó que Godoy Pelayo tiene “secuestrados” a los diputados de la Comisión de Vigilancia de la actual Legislatura, tal y como lo hizo con los anteriores.
Sonia Serrano Iñiguez, Milenio