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Martes, 31 Diciembre 2013 11:09

Productos 'milagro', sin reconocimiento oficial Destacado

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De todo tipo. Productos que prometen resultados milagrosos para bajar de peso están al alcance de todos los bolsillos en el mercado.

Se ofrecen como suplementos alimenticios y prometen eliminar los kilos de más

Los suplementos para bajar de peso se comercializan sin permiso de ninguna autoridad

GUADALAJARA, JALISCO (31/DIC/2013).- En México no hay un solo producto que prometa bajar de peso de manera “milagrosa” que esté reconocido por la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris); los que se comercializan lo hacen sin un permiso, asegura el director de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud Jalisco (SSJ), Celso Montiel.

 


Algunos productos en el mercado se hacen llamar suplementos alimenticios, que sí tienen vigencia y un registro sanitario. Sin embargo, cuando se ofrecen como productos cuya fórmula esté compuesta de medicamentos con supuestos extractos naturales que curan la obesidad, la diabetes y otras enfermedades, no tienen un reconocimiento válido que respalde su consumo.


“No recomendamos un producto único para bajar de peso, cualquier medicamento que se compre debe ser expedido por un médico, de preferencia, por un especialista que debe ser un endocrinólogo, quien especifica cómo debe ser su tratamiento”.


El pasado mes de noviembre la Cofepris lanzó una alerta sanitaria en todo el país, a fin de que las autoridades sanitarias estatales hicieran una búsqueda de dos productos para bajar de peso, que en Estados Unidos provocaron daño a las personas.


Se trata de los suplementos alimenticios OxyELITE Pro y Versa-1, ambos elaborados en Texas, los cuales ocasionaron hepatitis no viral y daño hepático severo en consumidores de Estados Unidos, por lo que la Agencia de Alimentos y Medicamentos alertó a su población para evitar su consumo.


Desde entonces y hasta la fecha, la SSJ ha realizado 477 visitas de verificación a establecimientos donde se venden productos naturistas y suplementos.


En 20 lugares se retiraron 263 frascos de productos “milagro”, 12 frascos de cremas, 12 frascos de OxyELITE Pro y uno más de Versa-1, informó el funcionario.
“Se realizaron las sanciones pertinentes, y se mandó la notificación a Cofepris para que estuviera notificado del problema de estos establecimientos”.


Lo que dice la norma
La Norma Oficial Mexicana NOM -008-SSA3-2010 Para el tratamiento integral del sobrepeso y la obesidad establece que la publicidad no debe anunciar una curación definitiva, no debe hacer referencia a tratamientos y no referirse a insumos o tratamientos que no estén respaldados científicamente en investigación clínica.
Además menciona que la persona que busque bajar de peso debe recibir un tratamiento multidisciplinario, con una dieta balanceada, así como un manejo nutricional, psicólogo y físico, por lo que se prohíbe que se induzca a la automedicación con productos sin el aval de un médico.


ADVIERTEN DE RIESGOS PARA LA SALUD Prácticas que pueden causar la muerte


A la playa con cuerpazo, a iniciar el año bajando de peso, a recibir la primavera con kilos de menos.
Todos estos mensajes van acompañados de la venta de productos milagro, que llevan a las personas a convencerse de hacer una dieta estricta que los lleve a su objetivo, señala la nutrióloga Olivia Soto Romero.


“Son productos que se venden como productos naturales, pero que no están avalados por la SSa, y como dicen que son naturales, piensan que no causan riesgo, pero también hay hierbitas que matan, y hay que tener cuidado con eso”.


Al menos tres de cada 10 de pacientes que llegan a consulta admiten que han tomado algún medicamento para bajar de peso.
En la consulta diaria, algunos pacientes refieren que tomaron algún producto “milagro” y les produjo un rebote, además de un malestar general, desmayos y mareos, por lo que prefirieron acudir con un nutriólogo.


Sin embargo, existen casos de personas jóvenes que han llegado a Urgencias del Hospital Civil “Dr. Juan I. Menchaca” con un cuadro de intoxicación, taticardias y vómito, y tras cuestionarlas, reconocen que consumieron algún producto para bajar de peso.


“Hay personas que llegan al hospital con infartos, con deshidratación, con desequilibrio electrolítico porque a la toma de estos medicamentos hay un desajuste fisiológico y eso hace que se provoque hasta la muerte”.


EL DATO Recomendación
En ésta época de fiesta es normal que la dieta cambie por una más calórica., y tampoco se puede tener una restricción tan severa.
La recomendación para no subir de peso de manera exagerada es balancear los alimentos y cantidades que se desayunan y comen, para poder cenar sin remordimientos.

TESTIMONIO Un rebote anunciado tras “dieta mágica” Una amiga le presentó la “dieta mágica”. Alejandra tenía cinco kilogramos de más, y por no tener tiempo para hacer ejercicio ni el suficiente dinero para pagar un nutriólogo, decidió hacerla.


De la noche a la mañana eliminó de su dieta la tortilla, el pan, el refresco, la fruta y la carne. Además, se tomaba un licuado que le vendía una persona que lo surtía en Estados Unidos, y que prometía que con eso tendría mejor cuerpo que cualquier artista de Hollywood.


La respuesta fue pronta y fácil; repentinamente comenzó a bajar de peso, y aunque  a veces sufría de mareos, no interrumpió el régimen.


Logró bajar tres kilogramos de peso, dejó de tomar el licuado y volvió a comer de todo; total, ya había logrado su objetivo. Pero el cuerpo le respondió diferente y de inmediato volvió a batallar con el cierre de su ropa y el botón de sus blusas.


La báscula le dio una nueva respuesta: no sólo subió los tres kilos que había bajado, sino que subió tres más y ya no eran cinco, sino ocho kilos de más.


Este tipo de situaciones es de lo más común, refiere la nutrióloga del Servicio Médico de Empleados del Hospital Civil “Dr. Juan I. Menchaca”, Olivia Soto Romero, pues con dietas “milagrosas” el cuerpo baja de peso y talla, pero lo que disminuye no es la grasa, sino agua y masa muscular, por la deshidratación a la que se ve objeto el tejido.
“Hay personas que comen puros chicharrones, carnitas, y de eso se alimentan todo el  día, y prácticamente, todas esas dietas van a funcionar, porque van a hacer bajar de peso, pero lo que no sabemos es que lo que se baja no es la grasa acumulada sino lo que mayormente se pierde es agua”.


Hay dietas como la de comer una sola fruta durante la mañana, tarde y noche. O la de la proteína, que la persona sólo consume carne  y deja de lado las verduras y frutas. Hay otras más peligrosas como la de la luna, en la que la persona toma sólo agua a lo largo del día.


NO HAY EVIDENCIA CIENTÍFICA Falta regulación En México sigue habiendo falta de regulación en la publicidad de productos llamados “milagro”, que prometen maravillas en el control de enfermedades o reducción de peso.


Anteriormente, la televisión era una de las armas más fuertes para los anuncios publicitarios de este tipo, lo que hacía más fácil que las autoridades identificaran la venta de productos como suplementos alimenticios, los analizaran y avalaran o, en su caso, ordenaran retirarlos del mercado.


Sin embargo, actualmente la publicidad ha tomado otra ruta y aparece cada vez más en redes sociales como Facebook, en donde un producto anuncia las supuestas propiedades, acompañadas de testimonios de “éxito”.


Para el investigador del Instituto de Nutrición Humana de la Universidad de Guadalajara, Enrique Romero Velarde, hace falta mayor vigilancia de parte de la Secretaría de Salud federal (SSa) en estos productos engañosos, pues muchos no son analizados ni investigados científicamente.


“Si se ofrecen con propósitos de bajar de peso, la SSa debería verificar la utilidad de los mismos, con sus posibles efectos adversos, porque yo no los conozco; si realmente son efectivos y bajo qué condiciones, para poder dar autorización y regular su uso”.


Según el especialista, la mayoría de los productos se basan en experiencias empíricas, sin aval científico, y las empresas que los hacen apuestan a la publicidad de boca en boca; es decir, que alguien comente que ya lo usó y pasar la voz para tener más ventas.


Romero Velarde asevera que con los índices de obesidad que tiene México, tanto en niños como adultos, si los productos “milagro” sirvieran no habría todavía prevalencia de personas con este problema, y sería muy fácil para la autoridad sanitaria utilizarlos en los tratamientos para bajar de peso y evitar complicaciones como la diabetes.


Desconoce si algún producto pueda tener efectos positivos en algunas personas, pero el hecho de no estar regulados y que se anuncien para todo tipo de individuos, los hace objeto de sospechas, pues los tratamientos para bajar de peso son de acuerdo con la edad, peso y otras características de cada paciente.


“El tratamiento debe ser individualizado, porque todos comemos diferente y tenemos diferentes hábitos de vida, entonces se debe adecuar a nuestro estilo de vida, nuestras posibilidades y gusto de consumir diferentes tipos de alimentos”.

 

El Informador

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