GUADALAJARA, JALISCO (15/NOV/2013).- El Centro Urbano de Retención por Alcoholimetría (CURVA) está listo, con sus siete celdas y una sala para menores de edad, en donde ingresarán, a partir de esta noche, los conductores ebrios; a la par, arrancarán los operativos aleatorios itinerantes en el programa “Salvando Vidas”.

El pronóstico es que este espacio de reclusión llegue al máximo de su capacidad, alrededor de 300 personas, en su noche inaugural. “Desafortunadamente, por ser el primer día, vamos a tener casa llena”, estimó la directora de Seguridad Vial de la Secretaría de Movilidad, Ana Laura Chávez Velarde, al presentar el área de retención. El CURVA, ubicado en la zona conocida como La Curva, en Zapopan, y donde los infractores pasarán de 12 hasta 36 horas, no es un lugar cómodo. Cuenta con bancas alrededor de los muros de las celdas, donde el respaldo son las paredes; hay excusados en una esquina de cada espacio, que están al descubierto.

Al ingresar, el infractor entregará teléfono, billetera, cinturón, agujetas, alhajas; no podrán pasar libros, sólo recibirá de sus familiares comida, ropa o cobijas (aunque ahí se les proporcionará una). En el lugar tendrán derecho a realizar una llamada telefónica. “Evidentemente, no es un lugar cómodo. Nosotros queremos que no regresen jamás”, subrayó la funcionaria.

En el lugar hay una sala para alrededor de 25 menores de edad y pantallas donde se transmitirán imágenes de accidentes y mensajes preventivos con los que se pretende concientizar a los infractores de evitar conductas de riesgo al manejar.

La recomendación es no conducir alcoholizado, de lo contrario, el conductor se arriesga a recibir una multa de hasta 13 mil pesos, un arresto administrativo de hasta 36 horas, o sufrir un accidente fatal. El propósito del programa es evitar muertes en siniestros de tránsito; en Jalisco fallecen en promedio cuatro personas al día en estos percances.

El Informador