Nicolás Solís Mecinas, de 27, vecino de la calle Javier Mina, en la colonia La Perla, en Guadalajara;
Luis Osvaldo Cortés Medina, de 20, vecino de la calle Turín, en la colonia Santa Fe, en Tlajomulco de Zúñiga,
Alberto Hernández González, de 24, domiciliado en la calle Isla Antigua, en Jardines de La Cruz, y
José Pablo García de Lira, de 18, quien vive en la calle Turín, en Santa Fe,
Los últimos tres señalados en la lista fueron detenidos en la colonia Santa Fe, de Tlajomulco, por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública cuando viajaban en una Chevrolet pickup, en donde llevaban partes de dos cajeros automáticos robados a mano armada del interior de tiendas de conveniencia en este mes.
Posteriormente, la división de Robo a Bancos, de la Procuraduría del Estado capturó a los otros dos sujetos y se aclaró su participación en los siguientes robos de cajeros automáticos:
El del cajero ubicado dentro de una tienda Seven Eleven en la calle Cuautitlán, cerca de su cruce con Lázaro Cárdenas, en la colonia Chapalita, municipio de Guadalajara, donde el 6 de diciembre de 2012, a las 4:25 horas, amagaron con armas de fuego al personal del negocio y arrancaron el cajero de la empresa Bancomer que contenía un millón 296 mil 400 pesos. El cajero se lo llevaron en una camioneta de tres toneladas.
También participaron en el ocurrido el 12 de diciembre de 2012, en un Seven Eleven de Lázaro Cárdenas y la calle San Gilberto, en la colonia Jardines de San Francisco, en Zapopan, con un millón 146 mil 900 pesos. La forma de operar fue similar al del atraco anterior.
Alejandro Ramsés Velasco Ramírez, alias “El Cabo”, dijo haber participado directamente en los robos.
Nicolás Solís Mecinas señaló que él se encargaba de cortar los cajeros una vez que los habían robado, y por ello recibía 7 mil pesos.
Los tres restantes detenidos dijeron que ellos se encargaban de tirar o deshacerse de los cajeros, una vez que les habían sacado el dinero, por lo que recibían 5 mil pesos cada uno.
Al grupo delictivo se les aseguró una finca en la calle Bologna, de la colonia Providencia en Guadalajara, en la cual se encontraron piezas de cajeros, que estaban en pedazos para destruir la evidencia. Ahí era donde los abrían para sacarles el dinero y luego los cortaban para deshacerse de los aparatos.
Los cinco detenidos fueron consignados al Juez Noveno de lo penal por robo calificado.
También se les aseguraron cuatro vehículos, contando la camioneta en la que iban los primeros tres detenidos:
Una Chevrolet, pickup
Una Chevrolet Silverado, modelo 2003, color azul
Un Volkswagen Bora, modelo 2009, color gris
El Gratuito
Un Dodge Neón, 2001, color gris.