Afirmó que ni el Arzobispado de Guadalajara, a cargo de José Francisco Robles Ortega, ni la Basílica de Zapopan, cuyo padre guardián es Fray Ramón Vívar, se han manifestado.
“Con el que tengo trato es con el arzobispo de Guadalajara Robles Ortega, uno tiene que tratar con las instituciones nombradas y reconocidas, como el arzobispo Robles Ortega a quien le informo sobre esta situación… No existe ninguna referencia diabólica o satánica en estas obras, incluso Fray Ramón decía que quien así las ve así tiene su conciencia”.
Afirmó que las esculturas de bronce elaboradas por el artista Alejandro Velasco Mancera permanecerán en la Plaza Juan Pablo II hasta septiembre del próximo año, cuando se termine en comodato que otorgaron
“Yo creo que quien las ve de una forma diabólica es porque tiene su mente bien, pero bien cochina… Si hay personas ignorantes que quiere ver cuestiones satánicas en lo que tiene que ver con la mitología griega por ejemplo, que mejor se pongan a leer”.
Las piezas representan a personajes mitológicos y fueron exhibidas en el pasado Festival Cultural Cervantino.