El papa Francisco ha visitado la ciudad Ostia, en el centro de Italia, donde presidió la misa dominical, informa Vatican Radio. Al mismo tiempo, antes de llegar al templo, el líder católico se reunió con varios feligreses, ancianos y enfermos en su mayoría, y pidió rezar por él.

"Recen por mí también. Estoy un poco mayor y un poco enfermo, pero no mucho", dijo el papa en tono jocoso, lo que provocó aplausos y risas de la audiencia.

Por otro lado, el papa Francisco comparó a las personas que tienen problemas de salud con Jesús, ya que son "similares en su sufrimiento". "Están sufriendo con él y llevan la cruz como lo hizo Jesús. En este sentido, son privilegiados", afirmó el papa.