Bloomberg tiene claro que las bebidas azucaradas contribuyen a la obesidad en EEUU, de ahí su propuesta, según recoge la CNN.
"La obesidad es un problema nacional, que se extiende por todo EEUU, los funcionarios de la sanidad pública retuercen sus manos diciendo: 'Oh, esto es terrible'. La ciudad de Nueva York no se va a quedar retorciéndose las manos; va a hacer algo. Creo que esto es lo que los ciudadanos esperan que haga su alcalde", explicó Bloomberg al New York Times.
La propuesta del alcalde de Nueva York prohibiría la venta de cualquier bebida azucarada de más de 16 onzas en cualquiera de los restaurantes de la ciudad, tiendas gourmet, salas de cine e incluso carritos de la calle, según los informes de Nueva York.
Las ventas de bebidas azucaradas de más de 16 onzas (0.47 litros) todavía estaría permitidas en los supermercados y tiendas de ultramarinos, de acuerdo con los informes.
La prohibición de Bloomberg no afectaría a las bebidas sin azúcar, los zumos, los batidos o el alcohol.