El comunicado se produjo tras un informe del comandante en jefe del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), el general de división Hossein Salami, quien calificó la adquisición del archivo como una "gran victoria" en la guerra de información contra el "régimen sionista".

Según IRIB, los servicios de inteligencia iraníes han llevado a cabo operaciones de inteligencia que les han permitido acceder a información sensible sobre los sectores nuclear, militar y de infraestructura de Israel.

El general Salami, en su informe al Consejo Supremo, destacó que esta información permite a Irán contrarrestar eficazmente un posible ataque a sus instalaciones nucleares y asestar un golpe proporcional a los objetivos israelíes.

Calificó el éxito del Ministerio de Inteligencia iraní de "histórico", afirmando que los datos obtenidos harán que los misiles iraníes sean más precisos y acelerarán el proceso de "destrucción del régimen sionista".

Previamente, el 7 de junio, Tasnim informó que la inteligencia iraní había incautado un archivo de documentos clasificados relacionados con el programa nuclear israelí. El ministro de Inteligencia iraní, Esmail Khatib, en declaraciones pronunciadas el 8 de junio, describió el archivo como un "tesoro" que mejoraría significativamente la capacidad ofensiva de Teherán.

Según Khatib, Irán planea publicar algunos de los documentos próximamente para demostrar la vulnerabilidad de la seguridad israelí.

Según Reuters, estas declaraciones han generado preocupación en Israel, donde las autoridades se han abstenido de hacer comentarios, pero han reforzado sus ciberdefensas. El contexto de tensiones entre Irán e Israel sigue siendo extremadamente complejo.

Según The Times of Israel, Israel ha atacado repetidamente objetivos nucleares iraníes, incluyendo un ataque al complejo de Natanz en 2021. Irán, por su parte, ha intensificado el desarrollo de misiles balísticos y ha enriquecido uranio al 60%, lo que alarma a Occidente, según la BBC.

La adquisición de los datos secretos, de confirmarse, podría representar un éxito significativo para Teherán, especialmente con las negociaciones del acuerdo nuclear congeladas en 2022, según Al Jazeera.