Se trata de dos fragmentos de madera de la “Vera Cruz”, en la que crucificaron a Jesús de Nazareth, según el Vaticano.
Una de las reliquias mide 5 milímetros y la otra de 1 centímetro; y ambas conforman una cruz de madera. “Hace algún tiempo, la Santa Sede donó a Inglaterra dos fragmentos de la reliquia de la verdadera cruz como signo ecuménico”, dijeron fuentes del Vaticano a Europa Press.
Este regalo se incorporó a la Cruz de Gales, ahora están engarzadas en el crucifijo de plata más grande y se visibilizan detrás de una gema de cristal rosa.
Solo estando cerca se pueden observar estos pequeños fragmentos en el crucifijo.
El arzobispo de Gales, Andrew John, ya bendijo la nueva Cruz de Gales en una misa celebrada en Llandudno.
La cruz será trasladada a Londres para encabezar la procesión de la coronación y podrá ser vista por millones de personas que seguirán la ceremonia de coronación de los nuevos monarcas en la Abadía de Westminster.
La Cruz de Gales fue un regalo de Carlos a la Iglesia Anglicana con motivo de su centenario.
Según el arzobispo: “Estamos encantados también de que su primer uso sea guiar a sus majestades a la Abadía de Westminster en el servicio de coronación”.
Tras la coronación, la Cruz de Gales será compartida por las iglesias anglicana y católica romana de Gales. El próximo 6 de mayo se realizará la coronación de los dos monarcas de Inglaterra, luego de que la reina Isabel II muriera en septiembre de 2022.
Los preparativos de la coronación se han visto empañados por la serie documental de Meghan Markle y el príncipe Harry, así como la publicación del libro ‘Spare’ (‘En la sombra’) de Harry.
El hijo menor de Carlos ha ventilado secretos de su familia y ha dejado mal parado a más de uno de los miembros de la familia real, especialmente a Camila.
Se conoció hace un par de días que, pese a las controversias y evidente distancia con la familia, el príncipe Harry sí asistirá a la ceremonia de coronación de su padre, pero irá sin su esposa.