El primer ministro Xavier Bettel, quien fue reelegido para un segundo mandato, hizo este anuncio como promesa de campaña y ahora se prepara para llevarlo a cabo.
Las tarifas de los trenes, los tranvías y los colectivos comenzarán a ser gratuitas en unos meses, bajo el mando del gobierno de coalición entre los demócratas, los socialistas de izquierda y los verdes. Ya lo eran para todos los niños y jóvenes menores de 20 años.
Con esta medida, Bettel no sólo busca ganar la simpatía de los luxemburgueses sino que además intenta dar batalla a uno de los problemas más caóticos del país: las congestiones de tráfico. Al poner el servicio gratuito, espera que sean cada vez menos los que decidan moverse en vehículos propios.
De acuerdo con lo publicado por The Guardian, en la ciudad de Luxemburgo, capital del ducado, viven cerca de 110 mil personas, pero cada día llegan otras 400 mil para trabajar. De hecho, en 2016 un estudio sugirió que los conductores pasaron un promedio de 33 horas en atascos.