Brasil es el país más afectado hasta el momento, con 3.893 casos sospechosos reportados desde octubre, según las cifras oficiales, lo cual supone un aumento del 30% con respecto a años anteriores, desde 2010.
"Agradezco a todos los países recientemente afectados la detección rápida del virus y la transparencia a la hora de notificar a la OMS, en línea con las regulaciones sanitarias internacionales", declaró Chan.
Además, explicó que la "propagación explosiva del virus del zika a otras áreas geográficas con escasa población inmune es otra causa de preocupación, especialmente teniendo en cuenta el posible vínculo entre la infección durante el embarazo y el nacimiento de bebes con el cráneo reducido".
En Brasil ya se estableció un vínculo entre el virus y la microcefalia, que la OMS está investigando en colaboración con otras instituciones nacionales e internacionales y que Chan considera "extremadamente preocupante".
Colombia, Ecuador, El Salvador y Jamaica recomendaron la semana pasada a las mujeres de estos países que no se queden embarazadas en los próximos meses.
Chan también se mostró preocupada por "el aumento de la aparición de síntomas neurológicos observados en algunos países coincidiendo con la llegada del virus".
El 80% de las personas infectadas por el virus no desarrollan síntomas.