Las imágenes registradas por la cámara del móvil policial son estremecedoras.

Los agentes realizaban un patrullaje de rutina por la avenida Washington Luis de Río de Janeiro, cuando quedaron atrapados en un embotellamiento. Impacientes, encendieron la sirena para que los dejen pasar.

En ese momento, dos delincuentes que iban en un vehículo situado unos metros más adelantes se desesperaron. Convencidos de que los policías iban a atraparlos, abrieron fuego sin piedad.

Uno de los efectivos recibió un disparo en el rostro y empezó a sangrar profusamente, mientras su compañero, que estaba al volante, intentaba realizar maniobras evasivas. No satisfechos, los criminales se bajaron del auto, se acercaron a pie al móvil policial y siguieron disparando. Una vez que vieron disipada la amenaza, robaron otro auto y se fueron.

Increíblemente, el conductor no recibió ningún impacto de bala. Cuando terminó la balacera, llevó a su compañero al hospital. Allí pasó cinco meses internado en coma, hasta que se despertó. Más de un año después, ya está recuperado.

Si bien el incidente ocurrió en febrero de 2014, el video completo se filtró esta semana en internet.

Infobae