Las autoridades del estado de Washington informaron que las tres hermanas que fueron halladas sin vida el 2 de junio en las cercanías del campamento Rock Island, en el condado de Chelan, murieron por asfixia.

Las menores —Paityn (9), Evelyn (8) y Olivia Decker (5)— se encontraban en una visita programada con su padre, quien ahora es el principal sospechoso de su asesinato. El informe forense, revelado el pasado viernes, concluyó que las niñas fueron víctimas de homicidio. Según los documentos judiciales, sus cuerpos estaban atados con bridas y presentaban bolsas plásticas cubriéndoles la cabeza.

El padre, Travis Decker, permanece en libertad y es intensamente buscado por las autoridades. Su vehículo fue localizado cerca del lugar del crimen, y dentro del mismo se encontraron rastros de sangre —humana y no humana—, así como objetos personales que pertenecían al sospechoso. Se detectaron incluso huellas de manos marcadas con sangre en la parte trasera de la camioneta.

A pesar del hallazgo de pruebas, los investigadores aseguran que estas han generado nuevas interrogantes. El análisis de ADN y huellas dactilares sigue en proceso. Las labores de rastreo se han intensificado y ahora incluyen la participación de agencias federales, ante la posibilidad de que Decker se haya desplazado fuera del área.

Las búsquedas abarcan amplias zonas boscosas, estructuras abandonadas y lugares en los que el fugitivo habría vivido recientemente. Decker, de 32 años, es un veterano del Ejército de EE. UU. que estuvo desplegado en Afganistán en 2014. Vivía sin domicilio fijo, entre moteles y campamentos.

Enfrenta tres cargos de asesinato en primer grado y tres por secuestro.

Aunque se desconoce si está armado, las autoridades advierten que cuenta con entrenamiento militar avanzado.

El caso ha causado conmoción, especialmente por las advertencias previas sobre su salud mental. Según Arianna Cozart, abogada de Whitney Decker —madre de las niñas—, el sospechoso tenía antecedentes de trastorno de estrés postraumático y no había logrado acceder a tratamiento adecuado a través del sistema de veteranos.

Aunque existían restricciones sobre su contacto con las menores, no había señales recientes de peligro inminente, indicó la abogada.

Cualquier persona con información sobre Travis Decker debe contactar al 911 de inmediato. Las autoridades continúan la investigación y no descartan ofrecer recompensas por datos que faciliten su captura.